Por José Rafael Sosa

Cannes. Riviera Francesa. Por vez primera, en Cannes se monta un operativo de seguridad militar a cargo del Ejército y la Marina de Francia, evidentemente como refuerzo para prevenir acciones terroristas, luego del atentado en el Manchester Arena, de la víspera.



Militares del ejército francés comenzaron hoy a custodiar el
Festival de Cannes, en prevención de acciones de terror.

Este 2017, la seguridad visible con motivo del Festival más importante festival de cine del mundo, se ha extremado y se deja sentir con medidas adicionales, en una estrategia mucho más cuidadosa y detallada, y que se ha extremado tras el atentado en el estadio de Manchester Arena y que ha dejado un saldo de 22 personas muertas y 59 heridas.

El temor al terrorismo estaba patente en Cannes, desde antes de la infausta información sobre la acción del Estado Islámico que en el final del concierto de la artista pop norteamericana Ariana Grande en el estadio, casi lleno, y diseñado para acoger 21.000 personas. Luego de la explosión se intercambiaron unas 240 llamadas de emergencia y se movilizaron 60 ambulancias y 400 agentes.



Este militar del ejército francés fue apostado frente al pabellón de India, a cuatro pabellones del de República Dominicana.

Antes del atentado terrorista de Manchester, ya se sentía en el campus ferial, el Palais du Festivals, un operativo de seguridad mucho más estricto que otros años, que incluso hacía pensar dos veces a quienes deseaban o necesitaban recorrer de un punto a otro, el ambiente en el interior de la sede del Festival de Cannes, ya que cualquier trayecto para ha duplicado o triplicado el tiempo que se tomaba anteriormente.

Ha aumentado el número de puntos de chequeo, apoyados en arcos detectores de metales, (fijos y manuales), son muchos más que antes, y la cantidad de agente dedicados a las labores de prevención de atentados o cualquier otro hecho inesperado, tienen, de acuerdo con lo que se percibe, una cantidad récord de efectivos uniformados.

La policía de Cannes se ha integrado a una estrategia de seguridad
que se destaca por medidas que no se habían tomado nunca antes.

La seguridad, aun cuando no sale en los titulares, juega un papel fundamental para el buen desarrollo del festival y actúa bajo un protocolo estricto, utilizando tecnología de punta.

El acceso ordinario a las instalaciones es regulado de una forma que no tenía precedentes respecto de las entregas anteriores, lo que no deja de ser objeto de las quejas de quienes están acostumbrados a una seguridad menos severa, pero finalmente –en lo que se observa cuando se mira a fondo—hay un entendimiento de que todo lo que se hace en este plano, es justo por la seguridad de todos.

La seguridad se ha extremado en Cannes, no se sabe si en base a informes o rumores, pero lo que finalmente se resuelve en mayores garantías en favor de quienes participan en las actividades.

En cada acceso a las instalaciones, se verifica el código de barras de los carnets oficiales de acreditación , se revisan los bultos, se pasa un detector manual de metales, aparte de dos verificaciones más de la identidad de quien entra
El sistema de seguridad ordinariamente funciona en base a un esquema detallado y estricto de alta efectividad, por lo que el número de incidentes violentos o graves es cero.

La seguridad en el Festival del Cine tiene cuando menos tres controles en cada entrada, lo que descarta completamente que nadie pueda entrar un arma de fuego o un explosivo.