La Organización de las Naciones Unidas ha dejado muy clara su posición ante WhatsApp al prohibir terminantemente a sus miembros que lleven a cabo cualquier tipo de comunicación a través del servicio de mensajería instantánea. Ello con el fin de proteger la privacidad de sus comunicaciones.

Ya que, las recientes fallas de seguridad en las que se ha visto a WhatsApp como protagonista han mermado mucho la confianza en la capacidad de la plataforma de proteger verdaderamente a sus usuarios de ataques externos.




El hackeo a Jeff Bezos

Uno de los detonantes que ha hecho que las leves sospechas o desconfianza en la plataforma se afianzaran ha sido el reciente caso en el que se ha visto envuelto Jeff Bezos. En el 2018, se desenvolvió toda una controversia a través de la cual la infidelidad de Bezos salió a la luz.



Esta se dio a conocer a través de periódico National Enquirer. Y, posteriormente, el propio magnate dueño de Amazon y del periódico The Washington Post la confirmó. En su momento, Bezos acusó al National Enquirer de extorsión por intentar manipular los contenidos de su diario al amenazar con revelar al público su aventura con Lauren Sanchéz.

Bezos no cedió y se llevaron a cabo los eventos que ya conocemos, su aceptación pública del hecho y su posterior derecho. Sin embargo, un detalle que continúa siendo una incógnita se trata de la fuente de la cual el National Enquirer pudo obtener la información en primer lugar.

La participación de Arabia Saudita

La ONU se dio a la tarea de iniciar una investigación en los primeros meses del 2019 y comenzaron a investigar un posible hackeo al teléfono de Bezos. Finalmente, fueron capaces de determinar que el mismo había sido víctima de un spyware conocido como Pegasus.

En este punto, comenzó a sospecharse que Arabia Saudita podía estar implicada en el hackeo. Ya que, el malware es propiedad del NSO Group iraní, con el que el país saudí tiene un contrato.

Banter, una aplicación de mensajería basada en video

Según lo que parece, un video de WhastApp enviado por un chat privado por el propio heredero a la corona saudí, Mohammed bin Salman, fue el origen de la infección. Sin embargo, ninguno de estos datos se ha verificado por completo. Por lo que, por ahora, solo quedan especulaciones.

La reputación de WhatsApp sufre

Por otra parte, queda más que claro que el origen de la infección fue un chat de WhatsApp. Debido a lo cual, muchos de los protocolos de protección que la plataforma dice tener quedan en entredicho.

Después de todo, Bezos fue hackeado en el 2018, pero incluso ahora, en el 2020 los detalles de la intrusión son difíciles de delimitar. Lo que implica que, el algoritmo de WhatsApp contaba con una falla lo suficientemente grave como para que este tipo de actividades pudieran darse en el mismo sin ser detectadas.

La decisión no se tomó de la noche a la mañana

Con una posibilidad tan grande de ser infectado con un malware sin siquiera notarlo hasta que sea demasiado tarde, la ONU ha tomado sus precauciones. Debido a ello, la decisión de evitar que sus miembros continúen usando esta plataforma ha sido rotunda.

Sin embargo, la verdad es que la petición para detener su uso ya existía, puesto que, no es la primera vez que WhatsApp se ve envuelto en un escándalo por malas políticas de seguridad. Además, siendo este propiedad del infinitamente polémico Facebook, las Naciones Unidas han visto como una idea más prudente el separarse de esta plataforma para evitar incidentes indeseados.
Con información de Tekcrispy