La Confederación Nacional de la Unidad Sindical (CNUS) afirmó hoy que cerca de 100 mil trabajadores, que debieron reintegrarse a sus respectivos puestos de trabajo, como parte del proceso de reapertura de la economía del país, han recibido de parte de sus empleadores cartas de desahucio, que implica una cancelación definitiva.

Rafael Pepe Abreu, presidente del CNUS, advirtió hoy que esto podría conducir a un estallido social de graves consecuencia.



Dijo  al periódico El Nacional que en tiempos normales recibir una carta de desahucio, era normal, porque la misma implica el pago de las prestaciones laborales, pero en la situación actual, es muy difícil que un trabajadores desahuciado pueda reinsertarse en un puesto de trabajo nuevo.

“Si, es cierto, que esa situación se está produciendo”, dijo Abreu al ser cuestionado sobre denuncias de que miles de trabajadores, que debieron reintegrarse a sus puestos de trabajo, al hacerlo recibieron su carta de desahucio.



Abreu precisó que en tiempos normales “eso no preocupa, porque implica el pago de las prestaciones, pero esa no es la situación actual”.

El dirigente sindical dijo que para salvar esa situación y evitar que en el país se produzca un estallido social ante el incremento del desempleo, debe realizarse un diálogo tripartito entre empleadores, trabajadores y el Gobierno.

“Es más, yo diría que en ese diálogo deben participar también el sector político, porque estamos en medio de una campaña electoral y “uno de los candidatos va a ser el próximo presidente y deberá enfrentar la situación”, dijo.

Abreu afirmó que, en su opinión, en vez de que se produzcan cancelaciones masivas, deben ampliarse el programa FASE otorgando mayores recursos a los trabajadores y preservar los contratos de trabajo hasta que se abra completamente la economía “y si en ese momento hay un sobrante de mano de obra, entonces recurrir al desahucio”.

Desde la semana pasada, al iniciarse la segunda fase del programa de reapertura, cientos de trabajadores han estado acudiendo a las oficinas del Ministerio de Trabajo para recibir orientaciones sobre el monto de sus prestaciones, tras recibir cartas de desahucio en vez de ser reintegrados a sus puestos de trabajo.

Se teme que cuando se llegue a la cuarta fase del proceso de reapertura, se incrementen los casos de despidos.