Una mujer, hasta el momento no identificada, acudió la noche de este martes al Palacio de Justicia de Ciudada Nueva con el fin de que la dejaran ver a Argenis Contreras, principal sospechoso del asesinato del abogado y catedrático universitario Yuniol Ramírez.

La mujer insistía a los policías y militares que custodiaban los accesos al piso donde se encuentra la cárcel de la Fiscalía del Distrito Nacional que la dejaran subir a la celda en la que permanecerá Contreras hasta que se le conozca medida de coerción.



Con un bulto en las manos, la delgada mujer gesticulaba, mientras con voz firme le decía a los custodios que debía ver a Argenis para entregarle ropa y medicamentos.

«Yo no me lo estoy inventando…. Le toca la medicina y su ropa, para bañarse», dijo la dama. Uno de los militares le explicó que en la celda había una doctora, a lo que ella respondió: «Felicidades, sus medicamentos son estos».



Minutos después, los agentes recibieron el sobre en el que la mujer dijo estaban los medicamentos, así como la ropa, que fue introducida por las autoridades en una bolsa blanca, a la cual le escribieron el nombre del imputado y el número que identifica su caso.

Indica el Diario Libre que la mujer pretendía hablar de forma personal con Argenis Contreras llevaba puesta una gorra y se negó a dar declaraciones a la prensa sobre su parentezco con Contreras, quien fue repatriado ayer desde los Estados Unidos, donde huyó en 2017 tras el asesinato de Yuniol.

Bajo un fuerte dispositivo de seguridad, Argenis fue recibido en el Aeropuerto Internacional de Las Américas desde donde fue trasladado a la sede de la Procuraduría General de la República. Allí permaneció bajo interrogatorio hasta alrededor de las 8:00 de la noche, cuando fue llevado a Ciudad Nueva.

Más de 15 agentes de la Unidad de Traslado de Alto Riesgo (UTAR) custodiaron a Contreras, quien en todo momento fue visto con chaleco y casco antibalas, lentes y mascarilla que impidieron ver su rostro.