Rusia afirmó este lunes que produce en un mes la misma cantidad de municiones que en todo 2022 y que aceleró la fabricación de armamento a raíz de su ofensiva en Ucrania, que entró en su 18º mes.

«Desde principios de año, se están produciendo muchos tipos de armas y de equipos militares especiales en unas proporciones muy superiores a las del año pasado», declaró el vice primer ministro ruso encargado de Defensa, Denis Manturov, citado por las agencias de prensa rusas.



«En lo que respecta a las municiones, estamos alcanzando un nivel en el que las entregas de un mes superan el total de los pedidos del año pasado», añadió Manturov, que también es ministro de Industria.

Según él, todas las empresas rusas del sector de defensa, salvo contadas excepciones, consiguen producir a este nivel y cumplir con los plazos de producción.



El conflicto en Ucrania, por su intensidad y por los duelos de artillería, conlleva un importante consumo de municiones y de equipos por parte de ambos bandos.

Rusia movilizó a su industria de defensa, mientras que Ucrania recibe una ayuda militar crucial de las potencias occidentales.

El pasado julio, la Unión Europea firmó un acuerdo para impulsar la producción de municiones de los Estados miembros, con el fin de reconstituir los arsenales de los europeos y seguir armando a Ucrania.

El consejero de la presidencia ucraniana Mijailo Podoliak dijo el miércoles a AFP que Kiev utilizaba de «5.000 a 10.000 obuses de un mismo tipo» cada día.

En mayo, el ministro ruso de Defensa, Serguéi Shoigú, subrayó que la acción de las fuerzas rusas en el frente dependía «en gran medida de que el reabastecimiento de material y de armamento militar se haga a tiempo».

«Los dirigentes rusos le dieron la tarea de aumentar el ritmo y el volumen de la producción a las empresas de la industria de defensa. Ya se tomaron las medidas necesarias», afirmó durante una reunión con oficiales de alto rango del ejército.