El precio de la mayoría de los productos alimenticios continúa caro en los centros de ventas, y algunos han roto récord al ofertarse hasta tres veces más del costo acostumbrado.

Es el caso de la yautía amarilla, cuyo producto escasea en el mercado y donde se encuentra, se vende entre 115 y 120 pesos la libra.



La auyama es otro ejemplo de aumento desproporcionado, ya que a pesar de ser un fruto que puede cultivarse en cualquier lugar, la libra de ese rubro se vende entre 50 y 60 pesos.

«Parece que el Gobierno ha abandonado el campo, porque vemos el ejemplo del pollo y el cerdo que subieron para jamás bajar. Si no das 80 pesos por una libra de pollo, no te la comes, y en los supermercados está más cara», dijo un comerciante consultado por El Nacional.



El cerdo se vende entre 130 y 140 pesos la libra en puestos normales, mientras en supermercados se oferta a más de 200. La carnes de res se comercializa entre 200, 350 y hasta 400 pesos, dependiendo la calidad.

A todo ello se suman los aumentos experimentados por los distintos tipos de leche, tanto en polvo como líquido, cuyo precio se ha disparado en los últimos dos años.

El aceite de cocina también se mantiene con precios elevados, lo que provoca quejas constantes entre amas de casas, que culpan al Gobierno por la situación.

Un envase pequeño de 96 onzas se vende a 590 pesos, mientras el de 128 onza se consigue a 674, en tanto, el tipo yumbo se oferta a mil 230 pesos.

La botella pequeña de 16 onza se comercializa a 94 pesos, y la de dos libras se vende a 210.

«Es todo que está caro, no hay nada barato, porque has la yuca está a 30 y 35 pesos la libra», dijo una mujer que se identificó como Ana Julia.