Un confeso asesino en serie condenado por el asesinato de su esposa y de otra mujer fue ejecutado con inyección letal en el estado de Florida, reportaron medios locales.

James Barnes, de 61 años, que no buscó detener su ejecución, fue ejecutado a las 18H00 locales (22H00 GMT) en la prisión estatal de Florida, informaron estaciones de televisión local.



Barnes cumplía una sentencia de por vida por el asesinato de su esposa, Linda, en 1997, cuando en 1988 confesó la violación y asesinato de Patricia Miller, una enfermera de 41 años.



Fue sentenciado a muerte en 2007 por el crimen de Miller.

Barnes fue entrevistado por el director de cine alemán Werner Herzog para la serie de televisión «On Death Row» en 2012 y confesó otros dos asesinatos por los que nunca enfrentó cargos.

A finales de julio, la Conferencia de obispos católicos de Florida instó al gobernador Ron DeSantis detener la ejecución de Barnes.

«La aceptación voluntaria del señor Barnes (…) no absuelve al estado de provocarla», escribieron en una carta. «En pocas palabras, nadie debe ser ejecutado en nuestro moderno sistema penal, incluso cuando lo aceptan voluntariamente».

DeSantis, uno de los candidatos para la nominación republicana en las elecciones presidenciales de 2024, firmó la sentencia de muerte de Barnes y declinó estar en su ejecución.

Barnes se convierte en el quinto interno ejecutado en Florida en 2023.

Hasta ahora se han realizado 17 ejecuciones este año en Estados Unidos.