Esta escultura refleja de qué forma llenamos nuestra mente de pensamientos sobre lo que sucedió en el pasado o lo que vendrá en el futuro, impidiendo disfrutar de cada instante del presente y las consecuencias de esto en nuestra vida…
Nuestros pensamientos nos dominan a tal grado que gobiernan nuestras vidas.
Nuestro exceso de pensamientos dañinos nos generan una preocupación y tensión constante, la culpa por el pasado y la angustia por el futuro.
Cuando somos capaces de generar mayormente pensamientos positivos y optimistas, el cerebro comparte su lugar con el corazón, dándose un equilibrio más sano para nuestras vidas.
Concéntrense en el aquí y ahora … lo pasado, pasó y no lo podemos cambiar… el futuro es incierto… permítanse VIVIR cada segundo siendo el 100% conscientes de ello…
Autor:Thomas Lerooy es un escultor y pintor de Bélgica, nacido en 1981.
