La Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD) reaccionó a la crítica del expresidente Leonel Fernández de que la República Dominicana pasó de ser un país de tránsito de drogas a receptor de estupefacientes.

En una nota de prensa, la entidad comparó los alijos decomisados durante los 12 años de gobierno de Fernández (1996-2000/2004-2008 y 2008-2012), en los que, afirmó, se alcanzaron los 41,733,37 kilogramos ocupados, mientras en los tres años que lleva de gobierno Luis Abinader se superan los 103,533 kilogramos de drogas incautadas.



Aseguró que en el gobierno actual se someten a los apresados con los cargamentos de estupefacientes, «algo que en el pasado no ocurría con regularidad, pues extrañamente los narcotraficantes nunca eran atrapados, quizás por el contubernio con algunas autoridades».

La DNCD sostuvo que los datos establecen que, durante el primer gobierno del expresidente Fernández, del 16 de agosto del 1996 hasta agosto del 2000, ese organismo ocupó 9,533,37 kilogramos de drogas.



Del 16 de agosto de 2004 hasta agosto 2008, la cantidad fue de 15,007.76 kilogramos, y del 16 de agosto de 2008 al 16 de agosto de 2012, ascendió a 17,189.25 kilos, para un total de 41,733,37 kilogramos en los tres periodos juntos, es decir, 12 años.

«En la misma fuente se puede constatar que, durante la presente gestión gubernamental, desde el 16 de agosto del año 2020 al 20 de octubre del 2023, la Dirección Nacional de Control de Drogas, bajo el mando del general, José Manuel Cabrera Ulloa, se ha ocupado unos 103,533,47 kilogramos de drogas, cantidad esta que casi triplica la totalidad de los tres periodos de gobierno del expresidente, Leonel Fernández», aseguró la DNCD.

La Dirección Nacional de Control de Drogas indicó que, bajo el mando de Cabrera Ulloa, ha tenido un «continuo reconocimiento y la confianza de organismos norteamericanos, europeos y de otras latitudes».

En el comunicado afirmó que una muestra de que en materia de drogas los narcotraficantes han tenido que emigrar a otros territorios, se puede medir por la cantidad de narcóticos capturados, porque «es fácil advertir a través de medios de comunicación nacionales e internacionales, que los delincuentes narcotraficantes operan desde otros lugares fuera del país».