El principal hospital de Gaza, en el centro de los combates entre Israel y Hamás, tuvo que enterrar a decenas de muertos en una fosa común, anunció el martes el director del complejo, donde miles de civiles siguen atrapados en una situación «horrible», denunció la ONU.

Presionado internacionalmente para proteger a los civiles en el hospital, el gobierno israelí también se enfrenta a las crecientes demandas de su población para conseguir la liberación de los rehenes tomados por Hamás, objeto de negociaciones que, según varias fuentes, se están acelerando entre bambalinas.



Pero en el terreno, la atención se dirige al hospital Al Shifa de la ciudad de Gaza, donde hay hacinadas miles de personas, incluyendo enfermos, trabajadores sanitarios y civiles desplazados por la guerra.

El movimiento islamista Hamás aseguró que el complejo está rodeado «por todas partes» por el ejército israelí y dio cuenta de «tiros intensos».



Este martes, los tanques israelíes se encontraban a pocos metros de la entrada del hospital que, según las autoridades del Estado hebreo, oculta una posición de mando estratégica para Hamás.

En línea con esas acusaciones, rechazadas firmemente por Hamás, la Casa Blanca aseguró este martes que el movimiento islamista y otro grupo palestino, la Yihad Islámica, «operan un núcleo de comando y control desde Al Shifa».

Hamás replicó que esas declaraciones «dan luz verde» a Israel para cometer «más masacres brutales» contra instalaciones médicas en el territorio palestino.

La guerra se desencadenó el 7 de octubre por el ataque cometido por Hamás en territorio israelí, que dejó unos 1.200 muertos -civiles en su mayoría-, según las autoridades israelíes.

En respuesta, Israel prometió «aniquilar» al movimiento islamista y lanzó una campaña de bombardeos en la Franja de Gaza, además de una operación terrestre el 27 de octubre.

La ofensiva israelí ha matado hasta la fecha a más de 11.300 personas, sobre todo civiles y de las que 4.650 eran niños, según el Ministerio de Salud de Gaza, gobernado por Hamás.

– «En nombre de la humanidad» –

«Hay cadáveres esparcidos en los pasillos del complejo hospitalario y las salas refrigeradas de las morgues ya no tienen» electricidad, afirmó el director de Al Shifa, Mohamad Abu Salmiya.

«Nos vimos obligados a enterrarlos en una fosa común», dijo el médico.

Además de la ofensiva militar, Israel impone desde el 9 de octubre un asedio sobre la Franja de Gaza, que apenas dispone de acceso a comida, agua, electricidad o medicinas.

Según una estimación de la Oficina de la ONU para los Asuntos Humanitarios (OCHA) en Al Shifa habría al menos 2.300 personas atrapadas por los combates.

Un testigo en el interior del recinto afirmó que el olor de los cadáveres en descomposición es insoportable.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), 22 de los 36 hospitales de la Franja de Gaza ya no están operativos.

El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, lamentó «la situación horrible y las pérdidas humanas importantes en varios hospitales en Gaza», indicó su portavoz, que pidió un alto el fuego inmediato «en nombre de la humanidad».

Este martes, Médicos Sin Fronteras (MSF) dijo en la red X que disparos alcanzaron una de las tres instalaciones que tiene la organización cerca de Al Shifa, donde se refugiaban «más de 100 personas, entre ellas 65 niños», incluyendo miembros de la oenegé y familiares suyos.

MSF pidió a Israel y Hamás un «paso seguro» para evacuarlos.

De su parte, la Media Luna Roja palestina dijo que después de «más de diez días de asedio» pudo evacuar hacia el sur de la Franja «a pacientes, heridos, sus familias y a los equipos médicos atrapados en el hospital Al Quds» de la ciudad de Gaza.

– ¿Acuerdo próximo? –

El día del ataque de Hamás, clasificado como organización terrorista por Estados Unidos, la Unión Europea e Israel, unas 240 personas fueron secuestradas y llevadas a Gaza, según el ejército israelí.

Coincidiendo con una reunión el martes del gabinete de guerra del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, el Foro de las Familias de Rehenes y Desaparecidos le exigió «aprobar esta noche un acuerdo para traer de vuelta a los rehenes de Gaza», según un comunicado.

Un centenar de familiares de rehenes y de simpatizantes con la causa iniciaron una marcha de cinco días y 63 km este martes desde Tel Aviv a la oficina de Netanyahu, en Jerusalén.

Fuentes oficiales egipcias declararon a una televisión próxima a los servicios de seguridad que el jefe del Mosad, la agencia de inteligencia israelí, estaba en El Cairo «para discutir sobre una tregua humanitaria y la cuestión del intercambio de prisioneros».

La situación de los secuestrados llevados a Gaza es una arista complicada y Catar está mediando en las negociaciones.

Abu Obeida, portavoz del brazo militar de Hamás, dijo el lunes que existe la posibilidad de un acuerdo para la liberación de cien rehenes israelíes a cambio de 200 menores y 75 mujeres palestinas que están en prisiones israelíes.

Pero este martes, otro responsable del movimiento islamista, Osama Hamdan, afirmó que «Netanyahu y su gabinete de guerra» eran responsables de que las discusiones estén «estancadas».

Por su parte, Biden dijo que cree que se alcanzará un acuerdo con Hamás para que los rehenes sean liberados.

– Investigan supuestas agresiones sexuales –

El ejército israelí reivindicó este martes que tomó el control de edificios gubernamentales de Hamás en Gaza, incluido el Parlamento y edificios del gobierno y de la policía.

La policía israelí anunció que está investigando acusaciones de que durante su asalto los comandos de Hamás cometieron actos de violencia sexual.

La guerra en Gaza atizó la violencia en otros frentes, desde Cisjordania, a Líbano y Siria, y existe el temor a una escalada del conflicto.

En Cisjordania, ocho palestinos murieron en enfrentamientos contra tropas israelíes, informaron este martes las autoridades palestinas que estiman que desde el estallido de la guerra, al menos 180 palestinos fallecieron por disparos de soldados o colonos israelíes.