«Barbie» y «Oppenheimer», las dos películas que dominaron la taquilla y generaron innumerables memes en Internet este año, encabezaron el lunes las nominaciones a los recientemente renovados premios Globos de Oro, con la inclusión en la lista de «La sociedad de la nieve».

En el caso de «Barbie», el largometraje de Greta Gerwig basado en la icónica muñeca de plástico, quedó al tope con nueve nominaciones a los premios, incluida la de mejor comedia y también designaciones por sus papeles para las estrellas Margot Robbie y Ryan Gosling.



Además, la película más taquillera de este año -con una recaudación de más de 1.400 millones de dólares a nivel mundial-, obtuvo tres nominaciones por la mejor canción, y para Gerwig por guión y dirección.

Por su parte, «Oppenheimer», el drama sobre el inventor de la bomba atómica dirigido por Christopher Nolan («Dunkerque», «Interestellar» y la trilogía «Batman: el caballero de la noche», entre otras), le siguió un escalón más abajo con ocho nominaciones, incluida la de mejor drama y mejor director.



Los principales integrantes del elenco, entre ellos Cillian Murphy, Emily Blunt y Robert Downey Jr, también recibieron nominaciones.

Las dos películas, denominadas en conjunto por la crítica y los fans como «Barbenheimer» luego de estrenos coincidentes en fecha en cines, dominaron la taquilla este año y ahora tienen un fuerte comienzo en la temporada de premios cinematográficos de Hollywood, que termina con los Óscar en marzo.

«Es increíble que hayan mantenido ese impulso», dijo el nuevo vicepresidente ejecutivo de los Globos de Oro, Tim Gray.

«El pasado julio, la gente reconocía lo exitosas que son, pero creo que nadie confiaba en que fueran a dominar los premios. Y lo hicieron».

Otras películas que demostraron ser populares entre los votantes de los Globos fueron «Los asesinos de la luna » y «Pobres criaturas», ambas con siete nominaciones, y «Vidas pasadas», con cinco.

Otro destaque fue para la nominación a mejor película de habla no inglesa para «La sociedad de la nieve», del director español Juan Antonio Bayona y producida por Netflix en base al libro del uruguayo Pablo Vierci.

La película de Bayona, que se podrá ver desde enero en Netflix, es un drama basado en un hecho real, el llamado «Milagro de los Andes», y cuenta las experiencias de los sobrevivientes del accidente de un avión de la Fuerza Aérea Uruguaya que transportaba a un equipo aficionado de rugby. Los jóvenes uruguayos subsistieron 72 días en cumbres nevadas de la cordillera con temperaturas bajo cero, sin alimentos y viéndose obligados a ingerir la carne de los difuntos.

También fue nominado el chileno-estadounidense Pedro Pascal como mejor actor en serie dramática por «The last of us» (El último de nosotros).

 

– Cambio en las votaciones –

 

Los organizadores de los Globos de Oro esperan que el éxito de «Barbenheimer» pueda desviar la atención de la reciente polémica que ha afectado estos últimos años a los premios, después de que Los Angeles Times revelara en 2021 que el órgano de votación, la Asociación de la Prensa Extranjera de Hollywood (HFPA, por su sigla en inglés), no contaba con miembros negros.

A principios de este año, un grupo de inversores privados, entre los que se encontraba el multimillonario estadounidense Todd Boehly, compró y revisó los activos y las marcas registradas de los premios, y la HFPA se disolvió.

Los miembros de la antigua HFPA son ahora empleados de la nueva empresa de los Globos de Oro y se les paga por ver películas, votar y escribir artículos para el sitio web de la organización.

Una medida que también ha levantado críticas sobre posibles conflictos de intereses ya que algunos de los inversores son empresas de la industria de Hollywood.

«No creo que sea así. En serio, nunca había oído hablar de eso», declaró Gray a la AFP. «Me complace la seriedad con la que todo el mundo se toma su trabajo», añadió.

De acuerdo con el grupo, pagar un salario de 75.000 dólares a los votantes con sede en Hollywood ayudaría a acabar con el sistema viciado por el cual los periodistas, precarios y a menudo independientes, aceptaban magníficos regalos y lujosos viajes de prensa pagados por los estudios.

Para tratar de dar una mayor imagen de imparcialidad, también fueron designados más de 200 votantes de 75 países que no están a sueldo de la organización, y por lo tanto no remunerados.