El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, afirmó este domingo que la guerra que libra el ejército israelí en la Franja de Gaza es de una moralidad sin igual, después de que Sudáfrica acusara al país de «actos de genocidio» ante la Corte Internacional de Justicia.

«Continuaremos nuestra guerra defensiva, cuya justicia y moralidad no tienen parangón», declaró Netanyahu al inicio de una reunión de su gobierno.



El ejército «hace cuanto puede para evitar herir a civiles, en tanto Hamás hace cuanto puede para perjudicarlos y los utiliza como escudos humanos», agregó el mandatario.

Hasta ahora, las operaciones militares en la Franja de Gaza le han costado la vida a 21.822 personas –mujeres y menores en su mayoría– desde que empezó el conflicto, el 7 de octubre, según el movimiento islamista Hamás, que gobierna en ese territorio palestino.



Israel lanzó esa operación en respuesta al ataque de milicianos de Hamás el 7 de octubre en territorio israelí, que dejó unos 1.140 muertos -civiles en su mayoría-, según las últimas cifras oficiales israelíes.

La Corte Internacional de Justicia (CIJ), órgano judicial principal de Naciones Unidas, anunció el viernes que Sudáfrica presentó una solicitud en la que acusa a Israel de participar en «actos de genocidio contra el pueblo palestino en Gaza».

«No, Sudáfrica, no somos nosotros quienes vinimos a perpetrar un genocidio, es Hamás. Nos mataría si pudiera», dijo Netanyahu este domingo, acusando a Pretoria de difundir «mentiras».