El camino recorrido por los Premios Soberano ha sido largo, interesante, tortuoso a veces, y promisorio en su papel de estimular el arte nacional dominicano.

Recordamos, como si hubiera sido ayer, el primero de estos premios, a cual asistimos en el hoy desaparecido Cine Olimpia  el 15 de abril de 1985, con un programa diseñado por Onix Báez como nunca más se ha repetido algún otro



Los Premios Soberano, la más importante premiación nacional al talento y la creatividad en el arte y la cultura, ha concluido, ratificando su condición de excepcional estímulo a los artistas dominicanos.

Los Premios Soberano 2024, fueron resultado de un proceso largo, trabajoso, con cambios sin precedentes en su plataforma de patrocinadores, que demandaron del equipo directivo de Acroarte, la visión para facilitar salidas y acelerar fórmulas que los hicieran posible.



Se debe abandonar toda visión deficitaria y concluir en que el Premio ha sido, en esencia, uno de los más brillantes en su montaje, en su producción y en su sentido de justicia para determinar los ganadores y ganadoras.

En su veredicto, la parte fundamental de todo el ritual de modas, escenografías, actuaciones que emocionaron al público concurrente al Teatro Nacional y a los miles que lo siguieron por televisión, ha primado la justicia.

Es esta una de esas oportunidades en que menos reacciones negativas se han producido en rechazo de determinados veredictos y eso es ya un aporte de confianza en el galardón.

Un nuevo ritmo

El montaje de los Premios Soberano estrenó nuevo ritmo de producción. Sus plazos fueron y taxativamente medidos fue medido y regulados en cada segmento, limitando los tiempos y evitando desviaciones, lo cual limitó intervenciones extensas y duró tres horas y un minuto (9 pm a 11.01 pm).

La producción de Premios Soberanos cambió a un ritmo que priorizó el tiempo, la oportunidad de ofrecer a notables talentos, como presentadores de premios, tal es el caso de Juan Luis Guerra, primero en dar a conocer los nominados a Orquesta del Año.

El ceremonial fue avanzado entregando el Premio Soberano (y la estatuilla) antes de comenzar el ceremonial, Durante la Alfombra Roja (que fue todo un mundo que no enfocaremos, por lo menos ahora)

Juan Luis fue tan correcto y medido, que no aprovechó el escenario para promover su película animada Capitán Avispa, que va a pantallas el jueves 4 de abril.  Tampoco lo hizo cuando acudió a recibir su Premio Soberano como Agrupación Dominicana Destacada en el Extranjero. Así es de respetuoso

Se recuerda que la extensión del ceremonial en el pasado, era siempre criticada y que en oportunidades se concluía sobre la una de la madrugada.

El número de apertura (parte 1) fue demostración del talento interpretativo de Hony Estrella, quien deslumbró con una voz hermosa, potente y bien timbrada, al compás de una bien concebida coreografía. Era una forma nueva de dar la bienvenida a los Premios sin las múltiples veces usado ya; “Otra vez…. otra vez….

Hony Estrella es un talento que apenas ahora nos damos cuenta de su valor artístico.

Y tras su actuación la parte dos del oppening, no pudo tener mejor criterio: los Hermanos Rosario y un conjunto de algunos de sus éxitos, encendieron de merengue el ambiente. Iniciaba la producción en el marco de una escenografía digital sobre una pantalla gigante, jugando con la imagen del premio diseñada en plateado para el trofeo sobre fondo dorado y con un símil de la cadena de ADN en plateado giratorio y una entrada que hacia un homenaje al Túnel del Tiempo.

El trabajo escenográfico fue impecable: la creación de ambientes marco para las actuaciones, fue excelente.

Las actuaciones que más impactaron fueron: Camila, Natalia Jiménez Rubby Pérez, Eddy Herrera y, desde luego, Angela Carrasco.

Los anuncios y patrocinadores

El Premio Soberano ya no tiene el carácter de plataforma para estrenar impactantes anuncios de sus patrocinadores y copatrocinadoras. Ya no fue así.

En otras etapas del Premio, había la expectativa de cuales anuncios estrenarían Cervecería Nacional Dominicana y Claro, en un modo de expectativa similar, guardando las distancias, del Super Bowl, de Estados Unidos.

Los anuncios estrenados (de Farmacia GBC y el de la APP de Laboratorios Amadita) no tenían el sentido espectacular de las promociones que con mucho tiempo estrenaban, lo que n quiere decir que los anuncios difundidos no tuvieran calidad en su producción, a pesar de tener ya algún tiempo en el aire.

Tres piezas publicitarias ya conocidas llamaron la atención por su calidad: el de Presidencia (Dominicanos de pura cepa) – que suponemos fue dirigido por José Enrique Pintor y que ciertamente sigue impactando en la percepción de quienes lo ven y escuchan; el de la Junta Central Electoral (Pasos fundamentales) que por primera vez vincula el voto con el tema medio ambiental y el spot video clip resumido del cantante Diego Jaar, (La gente dominicana) del Banco de Reservas, con una estimulante carga de optimismo nacionalista, parte de un video más largo. Los patrocinadores principales (Cervecería y Banreservas) no fueron mencionados por los artistas premiados, que se limitaron a agradecer (luego de Dios y sus familias) a Acroarte.

El pronunciamiento social

Escasa, muy escasa la expresión de los premiados en torno a la realidad social nacional e internacional.

La mayor parte de los galardonados con la estatuilla, evidenciaron tan escasa visión de lo que representa un pedestal nacional que miraban miles de personas, para limitarse a saludar “mi equipo de trabajo”, reconocer la paciencia de sus familias ante lo demandante de sus carreras, todo ello precedido de las clásicas “bendiciones” del Señor.

La mayor parte de los ganadores mostraron una falta absoluta de conciencia de lo que representaba la oportunidad para transmitir mensajes de trascendencia.

Solo hubo tres excepciones:  Un miembro del equipo de Santiago Matías, levantó el recuerdo de Paula Santana Escalante, prometiendo mantener la demanda de justicia en el caso.

Mileny Dippton, ganadora de Actriz de Teatro, dijo al ser entrevistada en la Alfombra Roja, que había llegado al ceremonial vestida de blanco en reclamo por paz en Gaza y por el cese al fuego en Palestina.

Y Manuel Chapuseaux, al recibir el Premio Platino de Honor por las Artes Escénicas, subió a plataforma con el pañuelo símbolo de Palestina y se expresó en demanda de paz para ese pueblo.

La televisión “diferida”

Resultó curioso, por no decir lamentable, que ninguno de los premios a la televisión fuera entregados en televisión. Todos los Premios Soberano a programas y talentos televisivos fueron entregados fuera de la producción de TV.

Lo extraño es que la mayor parte de la directiva ACROARTISTA, es gente de televisión. ¿Qué pasó?

Los cambios generacionales

Una línea de la premiación fue la clara opción por los nuevos talentos, por los jóvenes artistas que competían con veteranos rejugados en los afanes del arte.

Rafeli Rosario subió a recibir su Premio Soberano, sin nunca antes haberlo disfrutado y compitiendo con colegas de mayor trayectoria (y que muchas veces lo habían ganado).

El Blachy, el más nuevo de los nominados en Conjunto de Música Típica, superando a sus colegas de mayor trayectoria.

Y el caso más significativo: Topi tok, el programa de la televisión pública (RTVD), creado por Iván Ruíz, a partir de las generaciones de participantes infantiles en Pequeños Grandes Talentos, produccion que lanzó al público. Topi Tok es la primera nominación ganadora para RTVD desde 1995.

Fallos y pifias

Los fallos detectados son inherentes a toda empresa humana. Los Premios Soberano fueron posibles y pudieron haber sido mucho mejor. Errores en que se incurrió, pudieron haberse evitado. Hubo fallos técnicos, como la promoción que indicaba que Manuel Chapuseaux sería honrado con un Soberano en Artes Visuales, cuando era Soberano en Artes Escénicas, pero todo se aclaró con la entrega, introducida por unas emotivas palabras de Augusto Feria.

Hubo falta de curación de contenidos. Jochy Santos no debió seleccionar, justo pasado el 8 de marzo, un chiste tan machista como el de los “hombres solidarios”.

O Zacarias Ferreira pudo haber seleccionado una bachata que no le llamara “asesina” a la mujer, cuando la realidad que nos golpea es que los asesinos de mujeres regularmente son los hombres y , sobre todo, teniendo tan cerca el crimen contra la empleada de una empresa de zona franca Paula Santana Escalante.

O que se colara entre los textos de El Lápiz Consciente, uno que declara “Lo que yo quiero es cualto” y otras expresiones de carácter sexual, en el marco de un ceremonial de gala.  No estamos en contra el del género urbano, pero abogamos por textos de una lírica constructiva. Faltó una curación de contenidos.

En conclusión

Los Premios Soberano 2024 dejan una experiencia de éxito, a pesar de errores técnicos y de contenidos, nos muestra la variedad expresiva del talento artístico dominicano y permite vislumbrar la seriedad profesional con que la Asociación de Cronistas de Arte, asumió su tarea con responsabilidad.

Ficha Técnica

PRODUCCIÓN EJECUTIVA: Asociación de Cronistas de Arte

(ACROARTE)

Producción y Dirección General: César Suárez Jr.

Producción ejecutiva: Juan Tejera

Productora de línea: Elka Núñez

Diseño de Producción e Iluminación: Kyo Production, José Bermúdez

Asistente de Producción e Iluminación: Francisco Yanez, Juan Méndez, Julio César Weber

Sonido: ENLAB

Luces y Pantallas: Yas Group

Escenografía: Carlos Ortega y Carlos Ortega Jr.

Gestión Comercial: Karina Pimentel

Conductores: Jochy Santos y Hony Estrella

Equipo producción: Ricardo de los Santos, Helder de los Santos, Kasia Noemi Herrera

Asistentes de estilismo: Marlon Hidalgo

Maquillaje: Elis Mesa

Peinado: Elvira Sepúlveda

Fotografía: Karoline Becker

Social Media: Ismael Almonte