Antes que nada, habría que definir cuánto es «demasiado rápido». El momento sería cuando sentimos el amor, pero no se conoce bien de quién se trata. Así como también, cuando prefieres conformarte con sus puntos malos, o justificas algunas de sus actitudes que, en el fondo, ni tú ni los tuyos están de acuerdo.
Para no terminar en una relación enfermiza, o que no resulta conveniente en tu vida, lo primero que debes hacer es darte el tiempo suficiente para entender tus sentimientos. Si se trata realmente del amor, o quizás sea la necesidad de afecto. O porque el muchacho te gusta y en un principio fue bueno, pero después su malas actitudes comenzaron a aflorar.
Por otro lado, imujer.com te aconseja que tampoco proclames tu amor a esa persona, ni mucho menos a los cuatro vientos, a quien se cruce por tu camino. Cuando se hacen este tipo de declaraciones, te puedes sentir vulnerable ante la situación. ¡Ni hablar de si no es un amor correspondido!
Evitar los chicos malos
Si el amor no es buena idea, muchas veces se debe a que el muchacho no lo es. Evita aquellos chicos que andan rompiendo corazones por ahí y coleccionan chicas como si fueran monedas.
Es el lindo, bien peinado, exitoso. Pero narcisita y egoísta, y terminar en sus brazos será el mayor de tus errores.
¿Qué hacer si tu corazón palpita por un chico malo como este? Simple: ¡aléjate, retírate, corre, vete lejos! Salvo que seas de esas masoquistas a las que les gusta que las traten mal o destraten.
Ocupar tu tiempo
Si aún así, no puedes sacártelo de la cabeza, pues no le des lugar en ella. Trata de distraerte, y no tener tiempo para pensar en ese amor prohibido o no correspondido. Concéntrate en el trabajo, sal con tus amigos, o con otros chicos que tal vez sí tengan algo bueno para darte.
Sentimientos como este, un amor que no conviene, pone a prueba la fortaleza interior de cada uno. Realmente, no es tarea fácil y controlar el impulso, pero es momento de que la cabeza entre en acción.
Ya sabes, hay hombres que es mejor tenerlos lejos, debes aprender y aceptar las señales de que un hombre juega contigo o que no está interesado en ti.
