La Conferencia del Episcopado Dominicano consideró el aborto como una mafia que comete el crimen de matar a uno para salvar a otro.

En un comunicado, los obispos reaccionaron a propósito del intento de convertir el aborto en una ley especial.



Sostuvieron que junto a sus sacerdotes, religiosos y religiosas, diáconos y laicos están sumamente preocupados por los reiterados intentos de despenalizar el asesinato de criaturas, entre las que se encuentran las futuras mujeres dominicanas.



“El aborto no es un mal menor: es un crimen, es echar fuera a uno para salvar a otro. Es lo que hace la mafia”, expresaron.

Indicaron que el aborto, como sea que se plantee, será siempre eliminar una vida humana indefensa. Y plantearon que “no existe el derecho al aborto (matar), existe el derecho a la vida. Por esta razón, reclamamos al Gobierno dominicano, en sus tres Poderes, que apoyen la vida de todos, creando políticas públicas que garanticen la salud de la madre y de su hijo por nacer”.

Indica el diario Dominicanoshoy.com que los religiosos exhortaron a la ciudadanía a que no manchen con sangre inocente “las páginas de nuestra historia actual, y a honrar a Dios y a la Patria con cada uno de sus habitantes, de modo que no se tenga que llevar la carga de conciencia de haber contribuido a una legislación para matar”.

Señalaron que les preocupa la presentación de cifras y datos que no se corresponden con la verdad, ya que pretenden exhibir las tres causales del aborto como algo beneficioso para las mujeres del país.

“Hay un claro interés de mantener desinformada y confundida a la población para dar paso al aborto, el cual convertiría a nuestro país en otro lugar de beneficio para este lucrativo negocio”, indicaron.

Los obispos apuntaron que el aborto no es un mal menor, sino un crimen y expraron “qué triste y decepcionado estaríamos los dominicanos, si en vez de legislar para castigar al violador, se legisla para matar al inocente”. También recomiendan optimizar el sistema de salud, trabajar en la educación de los niños, adolescentes y jóvenes para promover una sexualidad responsable.