El portugués Cristiano Ronaldo negó categóricamente este miércoles las acusaciones de una exmodelo que dijo que el astro del fútbol la había violado en una habitación de un hotel de Las Vegas en 2009.

«Niego firmemente las acusaciones en mi contra», señaló en la red Twitter el futbolista portugués de 33 años, delantero de la Juventus de Turín.

Kathryn Mayorga y Cristiano Ronaldo con ella, en la fiesta.

Ronaldo subrayó que «la violación es un delito abominable que va en contra de todo lo que soy y aquello en lo que creo».

«Me niego a alimentar este circo mediático montado por personas que buscan hacerse publicidad a mi costa», agregó en este mensaje en inglés.

En un segunda publicación en Twitter el miércoles, el delantero de Juventus afirmó que estaba sereno frente a la situación.

«Mi conciencia limpia me permitirá esperar con tranquilidad los resultados de todas y cada una de las investigaciones», agregó.

La policía de Las Vegas anunció el lunes que reabrió la investigación sobre las denuncias de la exmodelo estadounidense Kathryn Mayorga, quien presentó una demanda en el estado de Nevada en la cual sostuvo que Ronaldo la sodomizó a la fuerza en un encuentro el 13 de junio de 2009.

Los abogados de Mayorga anunciaron una conferencia de prensa en Las Vegas para este miércoles.

Según Leslie Stovall, abogada de Mayorga, su cliente espera no solo «obtener justicia» al intentar que Ronaldo se responsabilice de sus actos, sino también «evitar que lo que le sucedió a ella se repita con otras mujeres».

En junio de 2009, la exmodelo denunció la presunta violación a la policía de Las Vegas y se sometió a un examen médico. Entonces se abstuvo de citar a Ronaldo por su nombre, mencionando apenas que se trataba de «un famoso jugador de fútbol».

El caso no prosperó. Mayorga temía ser «humillada públicamente» y víctima de «represalias», según la demanda civil presentada el 27 de septiembre en el tribunal de Las Vegas.

– Mediación sin efecto –

Según su relato, Mayorga conoció a Ronaldo en el hotel Palms de Las Vegas el 13 de junio de 2009, cada con su respectivo grupo de amigos. Ronaldo la habría invitado, junto con una amiga y otras personas, a su suite.

Allí, le habría pedido a la joven, de 24 años en ese momento, que se uniera al grupo en un jacuzzi. Ella no tenía un traje de baño, así que le ofreció unos pantalones cortos y una camiseta, acompañándola al baño para que pudiera cambiarse.

Según ella, fue mientras se desvestía cuando el futbolista irrumpió en el baño, exhibió su sexo y le solicitó una felación. Mayorga asegura que se negó y pidió abandonar las instalaciones. Acusa a Ronaldo de haberla empujado entonces sobre una cama al salir del baño y de intentar tener relaciones sexuales. Fue al protegerse el sexo con las manos, cuando el jugador la habría sodomizado.

Tras aquella velada, se organizó una «mediación privada» entre los representantes de Ronaldo por un lado, y la demandante y su abogada del otro, y se acordó una transacción financiera de 375.000 dólares como pago a Mayorga, a cambio de absoluta confidencialidad sobre los hechos alegados, así como la desestimación de cualquier proceso legal.

Para los abogados de Mayorga, ese acuerdo quedó nulo y sin efecto por la presión ejercida entonces sobre su cliente y debido al trastorno psicológico resultante de la misma.