Según los expertos a partir de los 25-30 años empieza el envejecimiento, proceso que, poco a poco, se va acelerando y comienza a ser más evidente a partir de los 40. Envejecer es algo natural, pero que no está reñido con querer verse lo mejor posible. Y sí, hay productos y tratamientos que te pueden ayudar, pero también hay cosas que tú puedes hacer para verte más joven a pesar de los años.
Cuida las canas
Una de las primeras señales del envejecimiento son las canas que suelen aparecer en torno a los 30. Muchos hombres deciden no ocultarlas, pero es importante cuidarlas, para que no amarillen. Para ello tendrás que usar un champú violeta al menos una vez a la semana. Las canas están de moda y pueden ser atractivas siempre que tengan un buen aspecto. Otra opción es teñirlas. Si no quieres ir al salón de peluquería, la firma eSalon acaba de lanzar una coloración personalizada específica para hombres: Colorsmith. Solo tienes que solicitar tu caja personalizada, y además recibirás el programa de reducción de canas.
Utiliza retinol por la noche
El retinol es el activo antiedad por excelencia. La esteticista Marta García nos cuenta que «el retinol es un activo con evidencia científica que acelera el recambio epidérmico, es decir, favorece que tus células muertas se eliminen con mayor velocidad, en consecuencia, mejoran la textura, apariencia y aspecto de la piel. Elimina y previene imperfecciones como los puntos negros, poros obstruidos… Aumenta la producción de colágeno y elastina, reforzando los pilares que dan estructura y sostén a nuestra piel; por lo tanto, mejora y minimiza las arrugas. Disminuye la producción de melanina, mejorando las manchas, y modula la producción de la glándula sebácea, disminuyendo el tamaño del poro y mejorando el acné». El retinol se debe aplicar solo por la noche, empezando por concentraciones bajas y aplicándolo en días alternos hasta que tu piel se acostumbre. Por el día deberás proteger muy bien la piel del sol.
Presta atención al contorno de los ojos
Una de las zonas que suele delatar antes que otras la edad es el contorno de los ojos, y más desde que llevamos mascarilla. Esta piel, más fina que la del resto del rostro, se arruga antes, y también sufre las consecuencias del cansancio, el estrés, el exceso de sal… en forma de ojeras y bolsas. Cuidar el contorno de los ojos con productos específicos es esencial para retrasar su envejecimiento, pero también debes utilizar gafas de sol, dormir las horas suficientes y llevar un estilo de vida saludable, con un alimentación variada y equilibrada. Cremas y mascarillas te ayudarán a hidratar la zona, y los correctores serán tus aliados para borrar las ojeras.
Cambia algunos hábitos como dormir poco o tomar mucho azúcar
Las cremas te pueden ayudar a verte más joven, sobre todo si eres constante y llevas una rutina diaria eficaz, adaptada a tu tipo de piel (limpieza, hidratación, protección solar…). Pero también es necesario seguir un estilo de vida saludable. Hacer deporte te ayudará a sentirte mejor, además de estar en forma. Seguir una dieta rica en frutas y verduras, principalmente y donde no falten tampoco pescados, carnes, huevos, frutos secos o cereales integrales, es importante para mantener un peso equilibrado y que tu organismo se encuentre mejor. Evitar alimentos procesados, los azúcares o el alcohol es bueno tanto para el peso, como para tu organismo en general, y también para tu piel e incluso tu cabello. Junto a la dieta, es importante descansar entre 7 y 8 horas a diario y evitar fumar.
Retoques naturales y discretos para rejuvenecer
La medicina estética es otra opción para verte más joven a medida que cumples años. Existen tratamientos preventivos que corrigen y retrasan las líneas de expresión y las arrugas, las bolsas o las ojeras. En Clínicas Dorsia creen que «los tratamientos antiaging ayudan a que el paciente recobre la confianza y seguridad, sintiéndose bien consigo mismo y con su aspecto. Tenemos un conjunto de protocolos de medicina preventiva pensado para personas de menos de 40 años».
Los más demandados, según los expertos de la clínica, son el bótox, pensado para aquellos pacientes a los que ya les ha aparecido alguna línea de expresión o arruga marcada. Consiste en inyectar toxina botulínica para suavizar las expresiones, como el estrés, la tristeza o el mal humor. Y el ácido hialurónico, que mantiene las estructuras faciales posicionadas, pudiendo eliminar y prevenir el efecto del paso del tiempo sobre ellas. Con el ácido hialurónico se combate la flacidez, se pueden eliminar las cicatrices del acné y mejorar algunos tipos de ojeras.