La batalla por la ciudad de Soledar, en el este de Ucrania, es una de las más sangrientas desde el inicio de la ofensiva de Rusia, que se está empleando a fondo para anotarse una victoria después de varios reveses.

 

– Minas de sal –

 

Antes del conflicto, Soledar era una pequeña ciudad de unos 10.000 habitantes, conocida por sus minas de sal, las más grandes de Europa. Su nombre, precisamente, significa «el don de la sal», en ucraniano y en ruso.



Situada en la región de Donetsk, que Moscú afirma haberse anexionado, Soledar se encuentra a unos 15 km al noreste de Bajmut, una ciudad más importante que los rusos tratan de tomar desde hace meses.

Bajo las galerías de sal hay 200 kilómetros de galerías subterráneas, que pueden representar una ventaja táctica en tiempos de guerra.



 

– Una batalla «sangrienta» –

 

Rusia y Ucrania coinciden en que los combates en Soledar están siendo especialmente duros.

«Todo lo que está sucediendo hoy en Bajmut o Soledar es el escenario más sangriento de esta guerra», dijo a AFP en una entrevista el miércoles Mijailo Podoliak, consejero de la presidencia ucraniana.

«Mucha sangre, muchos duelos de artillería, muchos combates de contacto, sobre todo hoy en Soledar», afirmó.

Incluso el Kremlin, por lo general discreto cuando se trata de pérdidas, admitió que los rusos habían pagado «un precio bastante alto» para avanzar hacia Soledar.

 

– Mercenarios rusos –

 

La batalla de Bajmut, en la que la pugna por Soledar es un capítulo más, está siendo librada del lado ruso principalmente por los mercenarios del grupo paramilitar Wagner, dirigido por un empresario cercano al Kremlin, Yevgueny Prigozhin.

El asalto a Soledar es obra «exclusiva» de los hombres de Wagner, afirmó Prigozhin, que según varios analistas busca reforzar su envergadura política en Rusia anotándose victorias militares en Ucrania.

Prigozhin recorrió las cárceles rusas en los últimos meses para reclutar presos, con la promesa de salarios elevados y una amnistía al cabo de un determinado tiempo combatiendo.

El analista militar Anatoli Jramchijin afirma que el rol de Wagner en Ucrania es «bastante importante» y que el grupo dispone de «un cierto número de ventajas importantes» respecto al ejército regular ruso: «un mejor entrenamiento y al mismo tiempo menos formalidades y menos burocracia».

Otro analista militar que pidió anonimato por miedo a represalias estima que si bien el papel de los mercenarios es «importante» en Ucrania, tampoco es «decisivo».

 

– Rivalidad –

 

Más allá de lo estrictamente militar, los combates por el control de Soledar y Bajmut han puesto de relieve la rivalidad encarnizada que, según numerosos analistas, existe entre Wagner y el ejército regular ruso.

El miércoles, Prigozhin anunció que su grupo controlaba Soledar, para luego verse desmentido por el ministerio ruso de Defensa. Incluso el Kremlin pidió «no precipitarse» en cantar victoria.

Para Jramchijin, es «evidente» que Wagner y el ministerio de Defensa se hacen la competencia en Ucrania, a tenor de las fuerzas y medios de que dispone la organización paramilitar.

Vasily Kashin, otro analista, cree que ambas partes «cooperan» pese a su rivalidad.

«No pueden hacer las cosas de forma independiente, forman parte de la misma fuerza», enfatiza.

 

– Reanudar las victorias –

 

Aunque los analistas discrepan sobre la importancia estratégica de Soledar, nadie duda de que llegado el caso las autoridades rusas aprovecharán para reivindicar una victoria importante, después de haber sufrido reveses notorios.

Desde hace meses, las fuerzas rusas han intentado tomar Bajmut, para lo que han enviado a oleadas de soldados y bombardeado sin cesar con su artillería esta ciudad ucraniana.

«Cada victoria es importante, sobre todo porque desde hace ya un rato no ha habido triunfos», destaca Jramchijin. «Estratégicamente, (la toma de Soledar) podría facilitar las cosas en Bajmut», añade.

El analista que solicitó anonimato cree que la toma de Soledar sería «una victoria táctica con poco valor estratégico», que tendrá «escaso impacto en la situación global» de la ofensiva.