El psicólogo Alberto Adames recomendó a personas recién casadas no mudarse cerca de sus familiares, debido a que en la mayoría de los casos la privacidad e intimidad se ve cercenada por visitas inesperadas y tóxicas.

“Qué es lo que pasa muchas veces es que cuando la familia está cerca y supuestamente hay confianza, hay límites que no se respetan: llegan a tu casa cualquier hora, entran a tu habitación, tocan tus cosas, hacen reguero en la casa e inclusive maltratan el electrodoméstico”, comentó.



Aunque aclaró que no todas las familias son iguales, reiteró que existen familiares que suelen ser tóxicos, por eso lo ideal es que las parejas tengan la libertad de disfrutar sin que alguien sienta la necesidad de inmiscuirse en todo.

“Es difícil convivir en un hogar donde la suegra o el suegro es un tanto tóxico, por eso siempre recomendamos, que el que se casa, casa quiere”, expuso Adames durante su intervención en el programa “Con la Dra. Controversia”, que transmite la plataforma digital El Nuevo Diario TV.



Sin embargo, Adames afirma que en los casos en que convivir con la suegra, cuyo carácter es difícil, no es algo que se pueda negociar, las parejas deben aprender a cultivar la inteligencia emocional.

“La persona que tiene a su suegra en su casa debe tener inteligencia emocional, porque si tu suegra es de carácter difícil, que tiene que discutir mucho, tú debes saber que hay una conducción más. Hay principio que plantea que no hay nada que se resista al amor, por más difícil que sea una persona, el buen trato, la amabilidad, el compañerismo, esa tendencia a que la persona entienda que yo estoy aquí, a la corta o a la larga va a terminar seduciendo a esa persona para que cambie”, detalló.