Roma, Italia. Un tribunal de Roma rechazó un elemento esencial de la ambiciosa reforma de los museos nacionales llevada a cabo por el Gobierno italiano al prohibir que ciudadanos extranjeros los dirijan.

«El mundo vio cómo cambiaron los museos italianos en dos años y, ahora, el tribunal administrativo de Roma anula los nombramientos de cinco directores. No tengo palabras», reaccionó en Twitter el ministro de Cultura, Dario Franceschini, que está dispuesto a llevar el caso ante el Consejo de Estado.



En una sentencia del miércoles, divulgada este jueves por el diario Il Sole-24 Ore, el tribunal consideró que la convocatoria de candidatos para renovar la dirección de los mayores museos italianos no podía extenderse a los ciudadanos extranjeros.

En 2015, Italia nombró a nuevos directores, incluidos siete extranjeros, al frente de 20 museos nacionales situados entre los más visitados del mundo, pero que ofrecían a menudo una imagen anticuada.



Esos nuevos directores tenían el objetivo de dar mayor relieve a sus colecciones excepcionales, con una ampliación de los horarios de apertura, cambios en las instalaciones, una mayor venta de productos derivados…

Algunos de los candidatos que no lograron puesto en 2015 denunciaron la convocatoria de 2015 ante el tribunal administrativo de Roma, que anuló el nombramiento de cinco de los 20 directores, entre ellos un extranjero, el arqueólogo alemán Gabriel Zuchtriegel, responsable del yacimiento arqueológico de Paestum, cerca de Nápoles.

Si se confirma la decisión del tribunal, los otros directores extranjeros podrían verse obligados a abandonar sus cargos.

Según un comunicado del ministerio de Cultura publicado este jueves, los museos nacionales experimentaron un gran aumento del número de visitas gracias a su reforma, descrita como «una verdadera revolución del sistema de museos italiano».

Entre 2013 y 2016, el número de visitantes aumentó en un 18%, esto es, en siete millones de personas, y los ingresos crecieron en un 38%, más de 50 millones de euros.